Es 2022 y arriba es abajo, el cielo es púrpura, los precios de la gasolina se acercan a los 10 dólares, la viruela del mono es intolerante, y ahora las órdenes ejecutivas se utilizan para adoctrinar a tus hijos. Bienvenidos al infierno de la América de Joe Biden.
El miércoles, Joe Biden anunció que firmaría otra orden ejecutiva para reforzar la cruzada de identidad de género radical de la izquierda en las escuelas de todo Estados Unidos.
La amplia OE proporcionará fondos al Departamento de Educación para crear un nuevo grupo de defensa que «emita orientaciones» sobre las políticas LGBTQI+ a «los estados, los distritos escolares y otras instituciones educativas», y también envía recursos al Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) que se centraría en los servicios de afirmación de la identidad de género para los estudiantes en los Estados Unidos.
Uno de los principales objetivos de la nueva legislación será ampliar el acceso a medicamentos y procedimientos médicos destructivos de «afirmación de género» para los niños, a pesar de las crecientes pruebas de las graves consecuencias a largo plazo (esterilidad, pérdida de masa ósea, otros problemas de salud) y el aumento de las tasas de suicidio entre los jóvenes que se ven obligados a realizar una transición médica.
Gracias a unos cuantos investigadores que por fin se han puesto manos a la obra y han estudiado este asunto, los resultados son cada vez más claros: el «cuidado de la afirmación del género», que implica llenar a los niños de bloqueadores de la pubertad y de hormonas para el sexo opuesto, está empeorando el problema de forma considerable.
Pero no hace falta ser un científico o un estudio clínico para darse cuenta de que no deberíamos dar a los niños pequeños, que no tienen las facultades para tomar este tipo de decisiones que alteran la vida por sí mismos, los medicamentos que se utilizan para castrar químicamente a los pedófilos (Lupron, bloqueador de la pubertad) – por no hablar de dar a las niñas jóvenes y sanas dobles mastectomías en nombre de la «afirmación del género» – es indescriptible lo que estos monstruos están haciendo a los niños de Estados Unidos.
Y ahora, Biden está ordenando este veneno de un plumazo.
Del anuncio y la «hoja informativa» de la Casa Blanca:
«Hoy, para conmemorar el Mes del Orgullo, el Presidente Biden firmará una Orden Ejecutiva que promueve la igualdad de las personas LGBTQI+…
…La orden encarga al HHS que trabaje con los estados para promover un mayor acceso a la atención de la afirmación del género…
…[la OE] ordena al Departamento de Educación que establezca un nuevo Grupo de Trabajo sobre Estudiantes y Familias LGBTQI+, que promoverá políticas para que los estados, los distritos escolares y otras instituciones educativas promuevan entornos de aprendizaje seguros e inclusivos en los que todos los estudiantes prosperen…»
Además de proporcionar recursos para ampliar el impulso LGBTQAI+ del gobierno federal, la orden también prohibiría la «terapia de conversión», que Merriam Webster define como «el uso de cualquiera de varios métodos (como la estimulación aversiva o el asesoramiento religioso) en un intento de cambiar la orientación sexual de una persona a heterosexual o de cambiar la identidad de género de una persona para que se corresponda con el sexo que tiene».
Sin embargo, con la nueva OE, la definición de «terapia de conversión» se amplió ampliamente. Ahora, la simple sugerencia de que un niño se abstenga de someterse a procedimientos médicos para cambiar su género será clasificada como tal y, por lo tanto, quedaría efectivamente prohibida una vez que Biden firme la orden, según el Post Millennial. No afirmar los deseos de género del niño de ninguna manera podría tener consecuencias para los funcionarios escolares, los consejeros infantiles e incluso los profesionales médicos que reciban algún tipo de financiación federal.
Como si el problema del abuso de menores en las escuelas no fuera ya suficientemente grave…
Fuente: TheGatewayPundit
