El BCE comunicó desde Fráncfort tras la reunión del Consejo de Gobierno en Ámsterdam que la cuantía de este aumento en septiembre dependerá de los datos de inflación. «Si las perspectivas de inflación a medio plazo persisten o se deterioran, un incremento mayor será apropiado en la reunión de septiembre», agregaron en un comunicado.
La medida denota la preocupación por el nivel de aumento anual de los precios al consumo, que alcanzó el 8,1% anual en mayo, el más alto desde que comenzaron las estadísticas en 1997, y es cuatro veces más alto que el objetivo del banco del 2%.
Los mercados están atentos a más detalles de parte de la presidenta del banco, Christine Lagarde. «La alta inflación es un reto importante para todos nosotros”, comunicó el banco, al tiempo que “el Consejo de Gobierno se asegurará de que la inflación vuelva a su objetivo del 2% a medio plazo».
La subida de los tipos es la herramienta habitual para combatir la inflación
Al aumentar el precio del dinero, el banco central puede influir en lo que las instituciones financieras, las empresas, los consumidores y los gobiernos tienen que pagar para pedir prestado el dinero que necesitan. Los tipos más altos pueden ayudar a enfriar una economía desequilibrada, con la precaución de no deteriorar el crecimiento.
En esta foto de archivo tomada el 21 de abril de 2022, los compradores adquieren alimentos en Rosemead, California. La inflación de los precios al consumidor en EE.UU. se desaceleró ligeramente el mes pasado, con un 8,3% en comparación con abril de 2021, según datos del gobierno publicados el 11 de mayo de 2022. © FREDERIC J. BROWN / AFP
El BCE también redujo su previsión de crecimiento para este año del 3,7% al 2,8% y aumentó sus perspectivas de inflación al 6,8% para este año, más que el 5,1% previsto en sus perspectivas de marzo.
Para 2024 la elevó al 2,1% desde el 1,9%. El banco considera que la inflación estará por encima del objetivo durante varios años, lo que constituye un argumento de peso para aumentar los tipos.
«Las proyecciones indican que la inflación seguirá indeseablemente elevada durante algún tiempo», argumentó el BCE.
La Reserva Federal de Estados Unidos subió su tipo de interés en medio punto el 4 de mayo y ha mantenido la perspectiva de más incrementos de este tipo. Por su parte, el Banco de Inglaterra probó subidas en cuatro ocasiones desde diciembre.
Las subidas de tipos ponen fin a una era del dinero barato que comenzó durante la crisis financiera mundial de 2009. Las subidas partirán de mínimos históricos de cero para su tipo de interés de préstamo a los bancos y de menos 0,5% para los depósitos a la vista de los bancos.
