La expresidenta de facto de Bolivia Jeanine Áñez, actualmente detenida, fue trasladada de emergencia a un centro médico para una revisión médica que no tomó más de dos horas.
Áñez, quien se encuentra encarcelada en el Centro Penitenciario Femenino «Miraflores» de La Paz, fue llevada este miércoles al Hospital del Tórax de la capital boliviana a las 12:00 del día (local).
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El motivo apuntado en la tarjeta de salud que autorizó su traslado a una clínica fue para realizarle una «valoración cardiológica«.
En la tarjeta de autorización, se ordenó que una vez que concluyese la valoración médica, la exmandataria de facto «deberá retornar» al Centro Penitenciario Femenino «Miraflores».
Poco antes de las 02:00 de la tarde, Áñez regresó a la cárcel de «Miraflores» en una ambulancia. La exmandataria de facto omitió responder las preguntas de los reporteros que esperaban su llegada.
El pasado martes 10 de agosto, el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) recomendó que un hospital de tercer nivel realizase una valoración externa a Áñez, después de que un médico confirmó que la exmandataria de facto tenía «hipertensión arterial sistemática bajo tratamiento«.
Proceso penal
Áñez fue detenida el pasado 13 de marzo y fue imputada por los delitos de terrorismo, sedición y conspiración, por los hechos de noviembre de 2019, que terminaron con un golpe de Estado contra Evo Morales y la imposición de un régimen de facto.
Además, la Justicia boliviana amplió la acusación contra Áñez y la señala por cuatro delitos relacionados con emitir resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes e incumplimiento de deberes.
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